Música para tus pies en el camino al maratón

Esta mañana -sí, tambien en Navidad, que el tío del mazo no descansa nunca- he salido a soltar piernas una hora. Solo. Apenas me he cruzado con un par de corredores en todo el trayecto de ida y vuelta a las marismas por el puente Sifón. Estos días de soledad también tienen su encanto. Te relajas un poco y disfrutas del paisaje, de la brisa, del tenue sol... y de la música.

En esta vida tan requeteconectada que nos hemos dejado imponer, tan en tiempo real, tan de notificaciones permanentes, cada vez nos queda menos espacio, mejor dicho menos tiempo, para disfrutar de la música, posiblemente el arte que más cerca es capaz de llegar del alma. Y en esto, queridos, el corredor de fondo os lleva ventaja, porque os aseguro que una de las mejores formas de sentir la musica, su ritmo, su melodía, su letra... es corriendo.

Hasta que este año he empezado a salir a correr con los Runners La Palmera, siempre he sido de entrenar sólo, con la única compañía del mp3. La música es una gran aliada, pero es importante elegirla bien. Porque -y si corres sabes que te estoy diciendo la verdad- la música no va por un lado y la piernas por otro, sino que forman un todo, una experiencia completa aliñada de endorfinas que puede ser muy placentera o muy molesta según esté mejor o peor organizada.

Hay quienes se conforman con la colección que le pasa el monitor del gimnasio, que realmente no echa gusto a nada pero acompaña. A mí me gusta dedicar tiempo a preparar la lista de canciones con las que entreno, a buscar aquel detalle, aquél cambio de ritmo, aquel solo de guitarra que sé que me va a hacer disfrutar.

Evidentemente, cada cual tiene sus gustos. Por ejemplo, el gran SerafínXDios, maestro del asfalto y del rock en inglés inventao, me consta que lleva una notable selección de heavy metal en la que Iron Maiden ocupa un lugar preferente. No es mala cosa, esa retahila que crean el bajo de Steve Harris y la batería de Nicko McBrain es casi perfecta para nuestro propósito. Para muestra un botón:


Como digo, cuestión de gustos. Particularmente prefiero que las listas sean variadas, que haya canciones rápidas, pero también algunas más lentas que te den un poco de descanso y aporten paz de espíritu; que haya mucho rock, pero tambien folk y hasta pop; en inglés y en español, pero sin desdeñar otros idiomas. ¿Se puede correr con el "Halelujah" de Leonard Cohen? No sólo se puede, sino que es muy recomendable.

Correr con música es una técnica, y funciona. Tanto que muchas aplicaciones de running para el móvil incluyen la posiblidad de marcar canciones que te aporten un suplemento anímico en un momento de necesidad. "Powersongs" las llama Runtastic, sin ir más lejos, igual que Nike Running Club.

Dos únicos consejos. El primero: donde escuches un ritmo como de un tren, un chucuchucú, ahí suele haber una canción buena para correr, como esta:


 El segundo: olvídate del flamenco y del flamenquito. Lo he intentado y no entra, salvo esta, que es "powersong":



Spotify está plagado de listas para correr. Si no te apetece fabricarte la tuya, usa alguna de las que ya existen.  Las hay de todas clases: por estilos, por velocidades, por géneros, incluso por pulsaciones a las que vas a llevar la patata si usas pulsómetro. A 120, a 140, a 160 pulsaciones por minuto y luego está el punk.

Esta es una de mis listas, y no incluye Carros de Fuego. Os la presto: Lista Running - Diario de Zizo. Mejor en modo aleatorio. Unos buenos auriculares (importante) y volumen suficiente para disfrutarla. De nada.

Semana 5 superada

La semana de Navidad... terminó. Prueba superada: por los acontecimientos sociales propios de estas fechas, sólo he corrido cuatro días, 50 kilómetros que a pesar de todo no están mal para esta semana crítica. He puesto dos kilos, pero son daños colaterales de los que espero recuperarme pronto. A destacar, las series del jueves, un 10x300 que hice claramente por debajo de 4 min/km, y la tirada larga del día de Nochebuena, 18 km con Juan y con Ismael, apretaditos, con muchos kilómetros en el entorno de 4:45.


Esta semana, que ya ha empezado, quiero cargar un poco más el kilometraje, a ver si pierdo de vista pronto esos dos kilos. De momento, para el fin de semana ya tengo programada la primera tirada verdaderamente larga, de 25 km. A ver cómo se da.






Comentarios

Entradas populares de este blog

Resumen semana 2. Sobre el dolor

Asalto a Barcelona

Si los semáforos hablaran