Cómo recuperarse de las Navidades
Ea, se acabó. Ya está el árbol recogido y guardado el Belén. Nos queda el recuerdo de estos días entrañables, las reuniones con los amigos, los regalos, los paseos bajo las luces de colores, las comidas con la familia, las meriendas, los desayunos, los aperitivos... y el roscón de Reyes que nos da la puntilla.
Hasta el más pintado sucumbe a la Navidad. Abstraerse supone no sólo un esfuerzo descomunal, sino también pasar por bicho raro y, francamente, no merece la pena. Estos días han sido para disfrutarlos, pero ahora toca borrar cuanto antes los efectos que nos han dejado las fiestas en forma de sobrepeso.
Se manejan habitualmente distintos datos sobre cuánto engordamos en Navidad. La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) estima que el promedio es de entre dos y cuatro kilos por persona, aunque algunos estudios -probablemente financiados por Polvorones La Estepeña- reducen considerablemente la cifra, como el publicado en el New England Journal of Medicine, que la sitúa de forma optimista en apenas medio kilo por feriante.
A mí la experiencia y la báscula me dicen que soy más de la SENN. ¿Qué le vamos a hacer, si en mi casa el turrón entra en el puente de Todos los Santos y durante tres meses se va reponiendo el arsenal hasta concluir con la remesa de mazapán que cada año desde hace décadas me regala Mariví?
¿Cómo arreglamos ahora el estropicio? Y, lo que es peor, ¿cómo arreglamos ahora el estrocipio con un maratón a la vuelta de la esquina?
Tranquilos. No nos pongamos nerviosos. Si, por situar un objetivo, queremos recuperarnos en un periodo de dos semanas, todo es cuestión de equilibrio, como casi siempre, pero hay que ser consciente de que toca hacer algunas renuncias. Ahí van las mías:
Semana 7. ¡Vivan las series!
La preparación para el Maratón de Barcelona del próximo 11 de marzo se aproxima ya a su ecuador. Ya van siete semanas y las percepciones son buenas. Me noto sobre todo menos cansado que otros años, aunque la carga de kilómetros es ya bastante alta, y bien de moral, si bien creo que los resultados en la larga distancia están aún por llegar, y ya se están retrasando un poco para mi gusto.
Esta semana he tenido descanso en el trabajo, asi que he podido entrenar por las mañanas, como hacen los profesionales. Es una sensación cojonuda, pero como creo que con esto no me voy a poder ganar la vida, lo mejor será que vuelva al tajo mañana.
Lo más destacable han sido los dos días de entrenamiento por series. El miércoles salí con Miguel Polvorinos a hacer unas series largas (30 min + 4x1000 + 2000). "Caballo Loco" arrancó como siempre al galope, y nos hicimos la media hora de supuesto calentamiento a 4:50 aproximadamente. Ya en las carpas de la avenida de Andalucía hicimos 4 series de 1 kilómetro, las dos primeras a 3:59 y las dos segundas a 4:04. Con una breve recuperación, nos lanzamos hacia la Palmera para los dos últimos kilómetros, que cubrimos a 4:29. Tan contentos estábamos que por la noche lo celebramos en la primera de espero que muchas quedadas navideñas de los Runners La Palmera.
El jueves, el partenaire para las series cortas fue el veloz Juan Córdoba. Dos tandas de 10x200 en el Parque de Zafra. Correr con alguien más rápido que tú tiene la ventaja de que te hace exprimirte, y no hay más que ver el resultado, todas las series entre 42 y 46 segundos, o sea, velocidades de hasta 3:30 min/km. ¡Increíble!
Hoy domingo, para cerrar la semana de nuevo por encima de los 70 km, he hecho una nueva tirada larga de 25 km, la primera parte acompañado y los últimos 10 km en solitario. Ha ido bastante bien, casi siempre rodando cómodo en el entorno de 4:55, pero en el km 23 me ha dado una pájara considerable. Vamos a echarle la culpa al frío, a las molestias de las mallas largas... mejor no pensarlo.
Hasta el más pintado sucumbe a la Navidad. Abstraerse supone no sólo un esfuerzo descomunal, sino también pasar por bicho raro y, francamente, no merece la pena. Estos días han sido para disfrutarlos, pero ahora toca borrar cuanto antes los efectos que nos han dejado las fiestas en forma de sobrepeso.
Se manejan habitualmente distintos datos sobre cuánto engordamos en Navidad. La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) estima que el promedio es de entre dos y cuatro kilos por persona, aunque algunos estudios -probablemente financiados por Polvorones La Estepeña- reducen considerablemente la cifra, como el publicado en el New England Journal of Medicine, que la sitúa de forma optimista en apenas medio kilo por feriante.
A mí la experiencia y la báscula me dicen que soy más de la SENN. ¿Qué le vamos a hacer, si en mi casa el turrón entra en el puente de Todos los Santos y durante tres meses se va reponiendo el arsenal hasta concluir con la remesa de mazapán que cada año desde hace décadas me regala Mariví?
¿Cómo arreglamos ahora el estropicio? Y, lo que es peor, ¿cómo arreglamos ahora el estrocipio con un maratón a la vuelta de la esquina?
Tranquilos. No nos pongamos nerviosos. Si, por situar un objetivo, queremos recuperarnos en un periodo de dos semanas, todo es cuestión de equilibrio, como casi siempre, pero hay que ser consciente de que toca hacer algunas renuncias. Ahí van las mías:
- Desayunar algo y cenar poco.
- Suprimir casi por completo el vino y la cerveza, al menos entre semana. Los cubatas, ni olerlos.
- Mucha agua, a todas horas.
- Supresión completa de dulces. Los restos de turrones, mazapanes, chocolates, etc... tal vez sigan en el cajón de la cocina dentro de dos semanas.
- Nada de picotear entre horas. Hay que evitar a los compañeros que guardan bolsas de frutos secos o patatas fritas en el trabajo.
- Llenar un poco menos el plato al mediodía.
- No pasar hambre, que tampoco es para tanto.
- Correr
- Correr
- Correr
Semana 7. ¡Vivan las series!
La preparación para el Maratón de Barcelona del próximo 11 de marzo se aproxima ya a su ecuador. Ya van siete semanas y las percepciones son buenas. Me noto sobre todo menos cansado que otros años, aunque la carga de kilómetros es ya bastante alta, y bien de moral, si bien creo que los resultados en la larga distancia están aún por llegar, y ya se están retrasando un poco para mi gusto.
Esta semana he tenido descanso en el trabajo, asi que he podido entrenar por las mañanas, como hacen los profesionales. Es una sensación cojonuda, pero como creo que con esto no me voy a poder ganar la vida, lo mejor será que vuelva al tajo mañana.
Lo más destacable han sido los dos días de entrenamiento por series. El miércoles salí con Miguel Polvorinos a hacer unas series largas (30 min + 4x1000 + 2000). "Caballo Loco" arrancó como siempre al galope, y nos hicimos la media hora de supuesto calentamiento a 4:50 aproximadamente. Ya en las carpas de la avenida de Andalucía hicimos 4 series de 1 kilómetro, las dos primeras a 3:59 y las dos segundas a 4:04. Con una breve recuperación, nos lanzamos hacia la Palmera para los dos últimos kilómetros, que cubrimos a 4:29. Tan contentos estábamos que por la noche lo celebramos en la primera de espero que muchas quedadas navideñas de los Runners La Palmera.
Faltan algunos, pero en la foto se aprecia claramente el estilazo de los Runners La Palmera. |
Hoy domingo, para cerrar la semana de nuevo por encima de los 70 km, he hecho una nueva tirada larga de 25 km, la primera parte acompañado y los últimos 10 km en solitario. Ha ido bastante bien, casi siempre rodando cómodo en el entorno de 4:55, pero en el km 23 me ha dado una pájara considerable. Vamos a echarle la culpa al frío, a las molestias de las mallas largas... mejor no pensarlo.
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